En una decisión polémica y sin precedentes, el mayor centro comercial de Asturias “obligará” a sus clientes a pronunciar bien su nuevo nombre.
“Gastamos una pila perres de la Virgen en publicidad pa que la gente lo aprenda… ¡pero no hay manera chico! ¡¿Tú sabes lo que nos costó en cartelón esi del paxarín?!»
Así se lamentaba un insatisfecho Julio Miranda, director de comunicación de Intu Asturias.
Para asegurarse de que los asturianos utilizan la nueva denominación del centro comercial se realizarán miles de encuestas personales y telefónicas. Pero las primeras respuestas a dichas consultas están resultando descorazonadoras para los entrevistadores:
«¿¡¡Qué intu ni qué mi madre!!?? ¿¡Eso qué ye un Pokemon de esos!? Anda, anda, quita pallá mocina… ¡que llegamos tarde al cine!”
“A mi dame igual lo que me cobren, yo seguiré llamándolo Parque Principao, ¡¡y punto!! Igual que sigo gritando “orsai” cuando voy al futbol… que no sé lo que ye, pero préstame decilo, ¿¡oyisti!?”
Además de cobrar por estacionar el coche, se revisaran cientos de miles de horas de grabación con cámaras y micrófonos de vigilancia estratégicamente distribuidos por todas las instalaciones. De este modo, cada vez que alguien diga “Parque Principado” se le amonestará con una sanción de 1€, que tendrá que abonar junto con las compras del día.
Aunque la actual dirección de Intu Asturias tiene plena confianza en las nuevas medidas, en este medio tenemos muchas dudas sobre su posible eficacia. Después de todo, la gente llama a las cosas como le da la gana, y no es fácil cambiar ciertos hábitos y costumbres. De otro modo, cómo se explicaría que un pasiano de 32 años, más de 100 kilos y calvo como una bombilla… ¡siga siendo “Paquirrín”!